domingo 24 de enero de 2010

Un giorno che non va...



Cuando en días como hoy
las rocas comienzan a ceder...
Las murallas se asemejan a la niebla
y cuando al crepúsculo
veo cristales posarse en las mejillas,
las nubes marchan siniestras
llevándose la luz.

Un día como hoy,
nació nublado mi pequeño cielo
y los rayos del sol se los llevaron ya...
Me limpio las necias lágrimas
y como en un vaivén de olas
ellas vuelven al instante.

Me quedo sola
me abrigo de un recuerdo
mi sueño es la esperanza
cruzando un gran océano,
me siento al borde de la cama,
me quito los zapatos
gastados y sin llegar,
mis pies tocan
el frío suelo de esta realidad
que me embarga;
como un látigo que se enrolla
en mi alma..

A esta hora en la oscuridad,
hasta las sombras se me escapan
se escabullen los suspiros,
cierro los ojos y el panorama
no es distinto...
Aún el fantasma continua intacto.
Siento la sangre lenta recorrer mi cuerpo
y no me resta una gota de espíritu,
inmóvil al pie del camino
no encuentro sendero
que me saque de este sitio...
Abrumador,
desierto,
anochecido
e inhabitable sitio.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails