
Antes de comenzar a leer el libro, he echado un vistazo a los capítulos más visibles,
(Aún inconclusos, llenos de tanta historia...)
Me acomodé en mi asiento, sabía que le libro que me disponía a leer
no iba a gustarme, sabía que al ir dando vueltas a las páginas llenas de tiempo,
amarillas de risas, o de polvo del olvido, iba a desear muy pronto
no haber comenzado la lectura.
Dado que el titulo del capitulo de este inquietante volumen,
me pareció atractivo a sobremera me entregue completamente a las letras,
pero cada vez que intentaba asimilar algún par de líneas...
Venían otras para deshacer mi intento.
Al dar vuelta al papel descubro palabras que definitivamente reconozco en mi vida
son de esta época, son de este mi tiempo y sin embargo son pasado
y a medida que voy avanzando entre las páginas
comienzo a saltarme los renglones, a leer sólo ciertas palabras.
(No por falta de interés, si no para calmar el atarantado torrente
de hilos de ayeres que caía sobre mis sienes y el dolor agudo que esto me provocaba)
Comienzo a tratar de no descifrar nada, de este libro escrito a mano, lleno de errores y sin acentos.
Y repito para mis adentros:
-Todos los libros son pasado, a medida que se escriben se van volviendo pasado.
Para convencerme a mi misma de pasar mis propias páginas, de guardar las cartas
en un sitio más oculto o de ya no sentir pena por lo pasados que se forjan aún un presente.
(Necesario o no.)
Me detengo un momento, respiro profundo, este libro que me parecía al principio
poco esperanzador, me ha llenado el cuerpo con un fantasma burlón e hiriente...
Aprieto mi boca en señal de desagrado y pienso. Qué será lo que viene si continuo leyendo?
A pesar de que lo he encontrado por casualidad, un día, abandonado en una calle,
cerrado pero llamándome a gritos...! Siento por alguna extraña razón que hay algo aquí
que debería entender... Pero soy un ladrón en esta historia, un intruso lector, un fantasma dentro de un fantasma.
De quién será este pasado? Quién ha escrito de su puño esta historia de amor? -Me pregunto,aun cuando el libro tiene un titulo y autor en portada.Pero aunque le conociera no sabría reconocer ni su letra, ni su tinta y me digo a mi misma.
-Es el pasado, es el pasado...Todos los libros son pasado, a medida que se escriben se van volviendo pasado.
He decidido terminar la lectura y al cerrar este libro, no se cuando tenga la oportunidad de hojearlo una vez más.Y por el contrario de lo que he pensado al inicio, este libro no me desagrada del todo,las risas amarillas, el polvo del olvido, el viento entre las páginas...Hacen que no me arrepienta de haber comenzado este pasado a medida que escribo mi propia historia.
Y respito para mi ser:
-Todos los libros son pasado, a medida que se van escribiendo se van volviendo pasado.
Y para bien o para mal, me doy cuenta... De que esta historia no acaba aún.